¿Sabes qué? Que te den cariño (:

Me mentiría a mí misma si te dijese que no me dolió, que no sufrí, que me dio igual. Y sí, me costó entenderlo y  más aún encajarlo, pero ya está, así como vino así se fue. Paso, no vale la pena. Mira que me lo tenían dicho, y yo no quise oírlo, no quise ver lo evidente, no quería despertar de aquel sueño, y ahora, me doy cuenta, que tonta fui, sabía demasiado y no lo quise admitir. No fui la primera, ni tampoco la última, solo un número más de una larga lista en la que todas hemos pasado lo mismo, exactamente igual. Te habla, cada día más cariñoso, te enganchas a él, no puedes parar de pensar en el sentido de esas palabras, de esas frases tan preciosas que te dice. Y no piensas, te rallas, pides consejo, todos te dicen lo mismo: Te quiere. Y te emocionas, sabiendo que a alguien le pareces perfecta, que alguien se preocupa por ti, que sin apenas conocerte lo sabe todo, tu color favorito, la música que escuchas, tus aficiones. Y hace todo lo posible por causar buena impresión, y claro está lo consigue. Te mira y miles de mariposas intentan salir de tu estómago, te toca y un escalofrío se apodera de tu pecho, te besa y rozas el cielo con la punta de los dedos. Tú estás viviendo un sueño, el más bonito que has imaginado nunca. Pero él se cansa y se acaba todo.