Un tal veintisiete.

Contigo aprendí a poner en práctica el "quien no arriesga no gana" y que es preferible arrepentirse de algo hecho que quedar a la sombra de un "pudo haber sido". Aprendí también a no ahogarme  en un vaso de agua y a coger los problemas por los cuernos. Cabe recordar que fue de ti de quien me quedó claro el " a lo loco se vive mejor ". Aprendí que no todo lo que mal empieza, mal  acaba, somos un claro ejemplo de ello. A echar de menos y a perder el miedo a quedar  como una idiota. Que sonreír tiene que ser una prioridad y a seguir adelante pase lo que pase. Aprendí que los gordos somos felices. 
Gracias por todas esas veces en las  que creíste en mi, e hiciste lo posible para que no me rindiera. Por esas sobredosis  de sonrisas diarias y todas esas pequeñas dosis de felicidad. Gracias también por aguantarme en mis días bordes, que ya se que no son pocos. Por  los  1307113 consejos que me llevas dados. Gracias por ser el primero que está ahí cuando estoy depre obligándome a salir a pasarlo bien. Gracias por estos seis meses , que en realidad, es mucho más tiempo el  que me llevas haciendo mejor persona y gracias ya de paso por todo lo que nos queda por vivir. No hay nada mejor que saber que siempre estarás ahí para hacerme feliz. La de vueltas que da la vida. Una última  cosa, y es que , te quiero y mucho.